Los secretos sobre el cuadro “Mañana en un bosque de pinos”
El cuadro “Mañana en un bosque de pinos” es uno de los cuadros rusos mundialmente más conocidos, pero ¿sabes qué secreto guarda?
¿Quién dibujó los osos?
Elaborado por Ivan Shishkin en el año 1886, el cuadro representa un bosque soleado al amanecer. El paisaje con tres ositos jugando sobre un árbol caído y recibiendo con alegría un nuevo día es quizás la obra
más famosa del pintor. Desde luego muy pocas personas saben que otro pintor, Konstantin Savitskiy, dibujó las figuras de los animales.
No se sabe muy bien por qué Shishkin mismo no dibujó los osos. Dice la leyenda que él, siendo un experto en flora, no sabía dibujar animales y le pidió ayuda a su amigo Konstantin Savitskiy. Esta teoría resulta
muy poco probable porque Shishkin aprendió el oficio en el taller de Rudolf Koller, pintor-animalista suizo muy famoso. Además, en otros cuadros de Shishkin aparecen preciosas figuras de animales, por ejemplo, “Atascadero”, “El campo” o “El paisaje alrededor de San Petersburgo”.
Los expertos de la pintura rusa dicen que fue Savitskiy a quien se le ocurrió la idea del cuadro. Los pintores llegaron hasta el lago Seliguer (cerca de la ciudad de Nóvgorod), en búsqueda de paisajes pintorescos, donde crearon la obra juntos. Originalmente el cuadro se llamaba “Una familia de osos en un bosque" y tenía solo dos figuras de osos.
Al principio, el cuadro llevaba dos firmas: la firma de Shishkin y la de Savitskiy. Pero cuando el famoso Tretiakov (empresario ruso, coleccionista, y filántropo, que dio su nombre a la Galería Tretiakov y al
Paseo Tretiakov en Moscú) recibió el cuadro que había encargado de Shishkin, se enfadó al ver dos firmas. El caso era que había encargado un cuadro de Shishkin y no quería tener obras colectivas en su colección. Tretialov borró la firma de Savitskiy y se negó a pagar al otro pintor.
Shishkin se sentía muy mal e intentó compartir el dinero ganado por el cuadro con Savitskiy. Savitskiy era demasiado orgulloso para recibir este dinero, así que renunció a los derechos de autor del cuadro y se
pasó muchos años sin hablarse con su amigo Shishkin.
¿Tres ositos… o cuatro?
En Rusia y el espacio postsoviético, el cuadro es conocido como “Los tres ositos”, a pesar de que están representados cuatro osos. En 1867, en Moscú, Ferdinand Teodor fon Einem construyó una fábrica de bombones, galletas y chocolate. El negocio fue creciendo muy rápido ganando mucha fama. Teodor fon Einem buscaba nuevas formas de atraer a clientes. Empezó la producción de bombones que difundían la cultura entre sus consumidores: los envoltorios reproducían cuadros famosos con una pequeña descripción. A finales del siglo XIX, Teodor fon Einem obtuvo el
permiso de poner las reproducciones de los cuadros de la colección de Tretiakov en sus bombones. Y uno de los cuadros que apareció en la envoltura fue justamente “Mañana en un bosque de pinos” de Shishkin.
Durante la Revolución de 1917, la fábrica fue nacionalizada y adquirió el nombre “Octubre Rojo“, por el que es mundialmente conocida actualmente.
En el año 1925, la nueva fábrica decidió modernizar el aspecto y el nombre del bombón, con un envoltorio azul y la inscripción “Osito patituerto“. Los bombones de praliné se hicieron muy populares, se exportaban y costaban bastante caro (4 rublos el kilo). Un poeta ruso, Vladimir Mayakovskiy (maestro de la agitación y la propaganda), escribió unas líneas graciosas sobre el precio del bombón: “Si quieres comer un Osito, hazte un librito” (refiriéndose a la libreta de ahorros).
Muy pronto la gente empezó a llamar tanto el bombón como el cuadro con el nombre de “Los tres osos“. Y hasta hoy día a nadie le importa que, en realidad, sean cuatro los osos del cuadro en lugar de tres.